La FDA ha emitido una nota
en la que anuncia una proposición de norma para valorar el uso de sabores en
productos derivados, incluidos los cigarrillos electrónicos. El interés de la
agencia se centra en conocer si ciertos sabores pueden incitar a los jóvenes
para iniciar el consumo, en tanto que otros podrían ayudar a que los fumadores
dejen el tabaco y se pasen a productos menos nocivos. En la actualidad, explica
la reseña
de Psychiatric
News que comenta la iniciativa, existen más de 7700 sabores diferentes
en los cigarrillos electrónicos, destinados claramente hacia el mercado de
consumidores más jóvenes, con nombres francamente cursis, alguno de ellos.
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